Políticas Criminales Fallidas: Honduras y su nueva Política Criminal
Política de Segurida Poblacional acogida en suplencia de la Política Criminal Antimaras
La Política Criminal que se instauró en Honduras como suplencia a la
política fallida Antimaras, fue la política de Seguridad Poblacional o tasa de
seguridad, esta consiste en “…establecer mecanismos de fortalecimiento a los
operadores de justicia a efecto de combatir eficientemente toda amenaza a la
convivencia pacífica y de seguridad personal y materia de los habitantes y
personas que se encuentren dentro del territorio nacional.” (Poder Legislativo,
2011, p.19).
Fuente: vídeo tomado de https://youtu.be/EflQ-gpo5YI
Además, este mecanismo impositivo pretendía institucionalizar y militarizar
las fuerzas de seguridad, para generar recursos que contribuyeran a combatir y
prevenir la criminalidad desde una administración pública escasa de recursos,
así como agravar las transacciones bancarias con una tasa del 0,3%, con lo cual
se incrementaron los fondos destinados a dicha pretensión.
La recaudación de esos recursos adicionales le permitió al Estado una mayor
presencia militar, alcanzando más de quince mil efectivos, de los cuales cinco
mil pertenecían a la policía militar. A esto se le sumaban, “13.500 policías
y unos 120.000 guardias de seguridad privados, que sirven para dar una imagen
del panorama al que se ven expuestos los 8,5 millones de hondureños.” (Paullier, 2016).
No obstante, a
nivel de gobierno central, se tomaban decisiones en un círculo cerrado,
evitando la participación de la ciudadanía en el control de recursos y en la
identificación de necesidades, mientras que a nivel de gobierno local, se
buscaba desarrollar toda una gobernabilidad. Lo anterior solo evidenciaba la crisis social que a
travesaba a Honduras, la cual lo sumía en una guerra entre los grupos
delincuenciales, la policía y las fuerzas armadas del país, dejando a la
población en medio de dicho enfrentamiento y cargando con las consecuencias del
enfrentamiento.
Aceptación o
recibimiento de la nueva política criminal
La Política Criminal de Seguridad Poblacional en Honduras, sustituyó a la
fracasada política Antimaras, la cual generó reacciones encontradas entre los
ciudadanos hondureños y los expertos internacionales. Es decir no tuvo un buen
recibimiento, esto como producto de una serie factores que no respondían a los
intereses y a las circunstancias políticas, sociales y económicas que vivía el
país en ese momento.
Fuente: vídeo tomado de https://youtu.be/IyzWBP5zMIU
Los factores que ocasionaron que la política de seguridad poblacional no
tuviera una buena aceptación o por lo menos la acogida que esperaban las
autoridades por parte de los habitantes de la nación, se debía en gran parte a
la concepción que tenían los ciudadanos de ésta, la cual se reflejaba en que:
·
Los militares que patrullaban las calles
no estaban lo suficientemente preparados para esa labor, lo cual era visto como
un problema y no como una solución.
·
Se consideraba perjudicial el uso de
militares para realizar las labores que le competían a la policía.
·
Se argumentaba que el uso de militares
para desempeñar las funciones de la policía, debilitaba y golpeaba la confianza
de la institución.
·
Se destinaban recursos a las fuerzas
armadas que podrían usarse para el fortalecimiento de la institución policial,
resultando en una práctica poco saludable para la democracia.
·
Los constantes reportes de excesos y
abusos de poder por parte de las fuerzas militares.
·
Los militares eran incapaces de tratar a
la gente y no tenían experiencia en el manejo de las comunidades, lo que los
llevó a cometer errores y excesos de la fuerza física.
·
La política no poseía una visión
distinta en el combate a la inseguridad.
·
Los analistas nacionales exteriorizaron
que las fuerzas militares no estaban capacitadas para asumir las funciones
policiales o las nuevas tareas que se les asignaban.
·
No abordaba a fondo las verdaderas
causas de la criminalidad y de la violencia ni los problemas de corrupción,
pobreza y exclusión social que nutrían el crecimiento de las pandillas.
·
Los esfuerzos eran insuficientes, ya que
no se estaba creando tejido social y no era un problema de oportunidades ni de
desarrollo, sino que para el gobierno sólo era un problema de delincuentes y
policías.
·
La sociedad hondureña no percibía las
mejorías, ya que en Honduras por cada 100.000 habitantes mueren asesinadas 60
personas, ha obligado a las personas a huir del país.
Asimismo, “durante el primer semestre de 2015, el Alto Comisionado de
Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en México registró un incremento
del 59% en el número de solicitudes en comparación con el primer semestre de
2014.” (Paullier,
2016).
Las autoridades hondureñas se defendían de las críticas y
de la forma en como la ciudadanía recibía la política criminal de seguridad
poblacional, argumentando que el uso de las fuerzas armadas en las labores que
le competen a la policía era más para la persuasión que para la prevención de
la violencia que cuando la Policía
Nacional se fortaleciera, se iniciaría un proceso de transición, con menor
número de personal militar en las tareas policiales.
“Las autoridades admiten que el plan es que, de forma paulatina, los
policías vayan tomando el rol asumido por los militares, algo que llegó a ser
recomendado por el Consejo de Derechos de Naciones Unidas.” (Paullier, 2016).
Retos del Estado
Hondureño en materia político-criminal
El Estado hondureño enfrenta enormes desafíos en materia socio-económica y
política, siendo uno de sus mayores retos erradicar la pobreza extrema, el
hambre y la ola de delincuencia en su territorio, los cuales son factores
detonantes de la realidad delincuencial que vive el país desde hace varios
años. Por tal razón, el Gobierno de Honduras se ha preocupado por buscar
alternativas que coadyuven a resolver la
problemática económica y social del país, y con ello, contribuir a
reducir la creciente ola de criminalidad y el arraigo de acciones ilícitas en
la población más vulnerable: la niñez y la adolescencia.
Fuente: vídeo tomado de https://youtu.be/1uH5g8DRAO4
Esta nación de América Central, pretende erradicar el hambre y la pobreza
extrema, en un esfuerzo por impedir que la juventud hondureña debido a las
condiciones de desempleo, poca alfabetización y pobreza, propician que se
incorporen a las pandillas. Entre otros desafíos socioeconómicos y
políticos-criminales que a traviesa Honduras son:
- La reducción a la mitad del porcentaje de personas cuyos ingresos sean
inferiores a 1 dólar por día.
- La creación de más empleos y mejores salarios.
- La
identificación precisa y clara del Organismo público responsable de
coordinar todo el accionar gubernamental de combate a la pobreza.
- La incentivación a la educación primaria y
secundaria para que la niñez y a la juventud no abandonen las aulas.
- La aplicación y
aprobación del marco legal para operativizar la integralidad de la
política de reducción de la pobreza.
- Motivar la
inversión extranjera para generar mayores divisas en el país.
- El establecimiento de los principales mecanismos o estrategias para
combatir la pobreza.
- Elaborar una
política criminal integral para la nación en donde se aborden temas
trascendentales para el desarrollo humano de sus ciudadanos.
- Rendición de
cuentas a la población, por parte del Estado hondureño, sobre la eficacia
de estos mecanismos para la lucha
contra la pobreza.
- Impulsar
programas culturales, deportivos y artísticos, en los cuales se involucre
a la población y en especial a los jóvenes.
- Establecimiento
de metas verificables en los indicadores de pobreza del país.
- Ejecutar
programas ocupacionales en los centros penales para resocialización y
rehabilitación de los sujetos procesados para una exitosa reinserción de
éstos a la sociedad.
- Estipular
sanciones acordes con la realidad jurídico-penal.
Referencias
Paullier,
J. (2016). BBC Mundo. ¿Cómo Honduras “dejó
de ser el país más violento
del mundo”?. Obtenido desde
http://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/02/160202_honduras_violencia_disminucion_tasa_homicidios_jp
Poder
Legislativo. (2011). República de Honduras. La Gaceta. Sección A: Acuerdos de Ley. Decreto No. 105-2011: Ley de Seguridad Poblacional. Obtenido desde
http://www.poderjudicial.gob.hn/CEDIJ/Leyes/Documents/Ley%20de%20Seguridad%20Poblacional%20(2,2mb).pdf
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